La formación continuada es el medio que utilizan los profesionales de la salud para estar al día en sus conocimientos, no solo como una apuesta personal de superación, sino también porque así lo requieren los continuos avances experimentados en las ciencias biosanitarias, además de su deber de servicio para la población general.
En este sentido, se podría decir que la importancia de la educación continua radica en tres aspectos: dar respuesta a las necesidades que aparecen en las consultas; contribuir a que el profesional mantenga el equilibrio entre la vocación y las dificultades propias de la profesión; y ser la base de la investigación y de la innovación.
La formación que se basa en la simple realización de cursos tiene el inconveniente de que, por muy interesantes que sean, su recorrido termina tras la finalización de este. En Formación Alcalá son muy conscientes de ello y, por eso, implementan en sus formaciones las tendencias más innovadoras relacionadas con la educación continuada en salud.
Estas tendencias se basan en una formación que combina el e-learning con diferentes modalidades educativas, con metodologías más activas que permiten que sea el mismo profesional el que seleccione y planifique los programas que él considere más oportunos para su devenir profesional y personal.
Formación Alcalá es una compañía de servicios profesionales especializada en sanidad y ciencias sociales con más de 21 años de experiencia. Su actividad principal es la enseñanza a distancia acreditada y certificada, pero también la edición de libros, impresión y servicios editoriales.
El principal objetivo de esta compañía es dar oportunidades a los profesionales para que mejoren su futuro laboral y, para ello, cuenta con más de 2.000 formaciones (cursos, másteres y expertos) que se caracterizan por estar actualizadas, ser dinámicas y, sobre todo, prácticas, ya que están acreditadas por universidades y organismos públicos y, por tanto, son baremables en bolsas y oposiciones.
Teniendo en cuenta esto, la compañía trabaja día a día por ofrecer una formación que implemente esas tendencias innovadoras y, con ello, conseguir unos resultados más eficientes y motivadores para los alumnos, que los llevará a poder afrontar los nuevos retos profesionales que se les presenten.
Unos retos que vienen derivados de las innovaciones tecnológicas, de las nuevas demandas sociales y de los nuevos postulados de regulación de las profesiones.